Add parallel Print Page Options

Cuéntenlo a sus hijos,
y que ellos lo cuenten a los suyos,
y éstos a los que nazcan después.
Todo se lo comieron las langostas:
lo que unas dejaron, otras vinieron y lo devoraron.

¡Ustedes, borrachos, despierten!
¡Échense a llorar, bebedores de vino,
porque aun el jugo de la uva les van a quitar!

Read full chapter